jueves, 7 de junio de 2012

Atarantamiento

Para Rosa Mancilla


Desde hace varios ya días no sé ni qué onda: las ideas se me confunden muy adentro de la cabeza y, cuando llegan a mi pensamiento, chocan unas con otras; se atoran cual piedras antes de entrar en un agujero. Como bien tú podrás suponer y pensar, yo ya no puedo pensar ni suponer nada.

Por ejemplo, escribir esto me está costando mucho trabajo; pero yo te estoy escribiendo porque tú eres mi amiga y yo necesito que tú me ayudes. Te repito: esta confusión que me ataranta desde la cabeza hasta los pies me llegó de repente; sin decir “ahí te voy”, como dicen quienes saben de estas cosas.


En realidad no entiendo qué pasa conmigo... Como luego me dicen que quizá cargo pedos ajenos, estoy empezando a sospechar que tal vez alguien se sopló uno en algún microbús al que me subí, y yo respiré demasiado profundamente sin darme cuenta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario